Consolidar tus estrategias con enfoque social tiene gran valor: por un lado, estás mejorando la calidad de vida en un territorio, y por otro, estás influyendo positivamente para que otras personas sigan tu ruta y materialicen sus propias ideas.
Para activar un proyecto social debes recurrir a un método: convocar a tu equipo, enfocarte en los retos de un territorio específico, aprender técnicas de facilitación, generar estrategias; elaborar, evaluar y validar los prototipos, encontrar aliados, consolidar versiones y aprender del proceso.
Protothinking® es un concepto y también el método a seguir. En cuanto concepto es estructura mental para aterrizar una idea al mundo real; en cuanto a método es creación y consolidación. Te ofrece herramientas de diseño para que puedas ser el facilitador del proceso, para ello establece cuatro focos o frentes de acción: definición, empatía, experimentación y validación.
Arriésgate a generar cambios locales basados en las premisas globales de Protothinkign®:
● La versión final no existe. Todo producto, servicio o estrategia con enfoque social sigue siendo un prototipo. No hay versiones finales, no se puede asumir una experiencia social como una versión final; cada versión trae su aprendizaje y es susceptible de mejora.
● Evalúa la percepción del usuario en todo sentido. Es importante tener en cuenta varios puntos de observación y la percepción de los usuarios a quién va dirigida la estrategia de diseño.
● Cuestiona las imágenes, los objetos y los supuestos. Los espacios y enfoques se transforman. Lo que funciona en un lugar no necesariamente funciona en otro.
● Piensa con las manos. Transforma el entorno. No hay límites para escoger y transformar el entorno a la hora de descubrir nuevas estrategias. Cualquier espacio se puede transformar.
